En una sesión grupal de terapia un psicólogo toma un vaso
con agua hasta la mitad y lo muestra a los presentes, todos lo observaron
esperando la típica pregunta…ven el vaso medio lleno o medio vacío?, sin
embargo el psicólogo los sorprendió con otra interrogante…
¿Cuánto
creen ustedes que pesa este vaso? Las respuestas variaban entre 200 y 250
gramos, El psicólogo sonrió y les respondió: el peso como tal no es relevante
en realidad depende de cuánto tiempo lo sostengo…
Si lo
sostengo solo unos minutos no hay problema, pero si lo sostengo una hora el
brazo me dolerá y si permanezco más tiempo, horas o tal vez días con él,
probablemente el brazo se podría hasta entumecer y paralizar, lo curioso es que
el peso del vaso siempre es el mismo, sólo que mientras más tiempo duro con él
se vuelve más pesado y difícil de soportar.
Exactamente
igual pasa con las preocupaciones, cuando pensamos en ellas tan solo un rato,
no pasa nada, si les dedicamos más tiempo comienzan a doler, pero si piensas en
ellas todo el día e incluso varios días
o hasta meses llegara el momento en que estaremos totalmente paralizados sin
saber qué hacer.
Tomado de internet.
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